The Wheel

Últimamente no tengo mucho tiempo que dedicarle a mi amado Gran Blog, estoy muy liado y voy as a whore by stubble.

Este grupo me gusta desde hace muchísimo. Lo que no sabía es que el guitarrista era Don Mauro. Y del bajista no comment. Ponedlo en HD que se ve y se oye muchim-mo mejor.

Después del emocionante record personal del otro día en Villarrobledo, voy y me endilgo una semana de un entrenamiento así: el martes 24 horas seguidas de curro apartando nieve de la carretera y echándole sal para que no os matéis vosotros, resto de conciudadanos; el jueves trote ligero de 7 km; y luego el sábado, víspera de la carrera de La Roda, me casco otros 9'200 y unos 1500 m de natación. Para relajarme y llegar fresquito.

Ahora bien, llegado a La Roda, suena el pistoletazo y, después de un pequeño atranque en la salida de más de 1000 almas descerebradas, me pongo a correr dale-que-te-pego como si fuera la última carrera que fuera a hacer en la vida. Después del primer km me uno a Lázaro con quien (esta vez si) llego hasta la meta. Eternamiente, de Molotov, fue la otra compañía elegida.

Por el camino, el típico circuito rodense. Varios sitios con amplificadores y música a todo trapo, unos pocos bares con su concurrida clientela en la puerta, la gente asomada a los balcones y a las puertas de sus casas, y esa Calle Cruces en la que siempre pierdo la cuenta de cuántas hay. Incluso me pareció ver una picota (o rollo) reconvertida en un mini arco del triunfo. Bueno, esto son gilipolleces de las mías, pero si alguien me lo aclara, salimos todos de dudas.

A la vez que we were beating ourselves the copper ibamos saludando a propios y extraños en los innumerables ida-y-vuelta que hay en este trazado. Destacar a Ana Mari del C.A. Valdeganga, Laureano y AMC del Don Quijote, a Javi 'el Boti' y a Emilio del C.A. Villalgordo. No nos dio mucho gusto ver como JuanRa tuvo que retirarse en el km 8 con fuertes dolores (seguro que no es nada).

El km 10 lo pasamos en 48:29 que está muy bien, pero ya presagiábase que la marca no iba a ser tan buena como en la carrera del domingo anterior. No todas las semanas puede ir uno batiendo sus propias marcas y menos en estas distancias. Aun así no nos lo tomamos como un paseo ni mucho menos y fuimos poniendo en el punto de mira a varios objetivos de lo más variopintos. Unos atléticos y otros por el mero hecho de alegrarnos la vista y establecer un pódium alternativo. Al final, apretando mucho los dientes y tirando de palabras mágicas, en un esfuerzo frenético, paramos el crono en 1:43:09 que es un tiempazo (ya me lo digo yo todo, tranquilos).

Me preocupo por mi mismo cuando celebro en pareja mis llegadas a meta.

Llegada mariconetti les llamo yo a las de este tipo.

Añadir que esta gente que organiza la media maratón de La Roda parecen ser unos recalcitrantes del buen hacer. Cuando un año lo bordan en todos los sentidos y parece que es imposible mejorar, al año siguiente se superan a si mismos y lo clavan de nuevo. Enhorabuena a todo el que le toque algo como organizador o voluntario, aunque sea de refilón, incluído el tío que tiraba las cervezas en el pabellón con mucho ahínco, como si ya se hubiese metido unas cuantas between chest and back, sí, ese, el mismo que vino a desatascarme el fregadero este verano y me destrozó la mosquitera. Por cierto que cervezas me tomé tres que me entraron tan bien que ya estuve borracho hasta por la noche.

Y qué decir de la bolsa de obsequios. Más completa casi imposible, con mención especial a la camiseta técnica de manga larga marca Majo y, sobre todo, el sobre promocional de una crema masajeatoria con un olor a mentol tan fuerte que te desatascaba la nariz aunque te la echases en los gemelos, y con un efecto frío tan intenso que me dieron temblores (no es coña). Menos mal que al llegar a Albacete unos amigos nos invitaron a migas con huevos fritos mojadas con un buen Chianti, digo Rioja, que nos hicieron entrar en calor por la puerta grande.

En el apartado dosquinceño, una nutrida participación destacando la vuelta a la distancia de Fran Olivas y María Jesús (MMP con 2:00:15), desde Almansa, así como la lesión-inconsciencia de Dioni (que acabó maltrecho) y la ya comentada de Juanra.

Y bueno, no quiero aburriros más (¿o es 'aburríos'? ¿o 'aburrirsus'?).

Gracias por estar ahí.
De nada por estar aquí.

Salu2.

Oakwood village

No llevaba yo idea de hacer lo que hice, pero una vez metidos en harina, adelante y bienvenido sea ese nuevo record personal.

Estos pavos fueron, en parte, culpables. Esta es una de las mejores canciones que hay para acelerarse y no parar.

Siempre hace un poco de fresquete en Villarrobledo, sobre todo en esa calle que hay después del tramo peatonal, donde el avituallamiento. Y el otro día no fue la excepción.

Llegamos demasiado pronto para mi gusto, y además la carrera era también demasiado tarde para mi gusto. Pero bueno, como JuanRa está preparándose el Maratón de Madrid y quería correr 9 km previos a los 21 de rigor, pues nos fuimos, El Fuerzas y servidor, con él. Después de ese trote, dijo que correría a unos 5 min/km, lo cual ya era mi ritmo de récord. Bueno, pues salimos a eso de 4:40-4:50 junto a Juan Perdigón y David, así que le dije a JuanRa que les dejase ir para que no nos llevaran por la calle de la amargura. Pero en vez de eso, como se veía fuerte, me dejó atrás y siguió con Juan, porque David tiró palante y nunca más se supo de él hasta la meta.

Yo a lo mío. En el km 4 ya iba solo, pero no bajé el rimo. Sobre el 6,5 un individuo grandón que confesó ser toledano, residente en Madrid y debutante en la distancia, me preguntó por los ritmos a los que ibamos. Iba un poco perdido pero sobrado, llegando juntos hasta el final de la 1ª vuelta, pasando el 10.000 en nada menos que 48:18 (una de mis mejores marcas y aún quedaban 11 km). Justo al pasar por meta, me alcanza Pepe Polo, gracias a quien conseguí no aflojar demasiado.

Si por él hubiera sido, nos hubiésemos desmelenado un poco más, pero me concentré en lo que quedaba y, trotando a buen ritmo, controlé la carrera y los tiempos. Todos los kilómetros netamente por debajo de 5 minutos. La verdad es que iba disfrutando como un enano, sabedor de que iba a hacer marca personal en el pueblo que me vió debutar en la distancia allá por 2006. Zancada larga, ritmo vivo, ligereza en las piernas.

Adelantamos a mucha gente, aunque de vez en cuando también nos pasaba alguno a una velocidad considerable. El km 15 lo pasé en 1:11 (es una de las pocas comprobaciones que hice in situ, las demás las estoy haciendo ahora mientras escribo). Así llegamos a los últimos kilómetros, esos que son un poco cuesta arriba y, el domingo pasado, con el viento en contra. Fueron los más lentos, con 5:01 y 5:04 en el 19 y 20. Cuando quedaba sólo un km volví a mirar el reloj y ¡¡oh, sorpresa!! llevaba 1:36, así que me iba a ir a 1:41 en vez de 1:43 como mentalmente iba suponiendo.

Apreté los dientes, dije varias veces la palabra talismán, porque ya iba agotado y con pocas fuerzas, y entré en meta en 1:41:04. Excelente.

Gracias por estar ahí.
De nada por estar aquí.

Salu2.

Little dawn fountain

Para algunos será una mierda de marca, pero yo el domingo hice mi mejor diezmil. Cuarenta y seis minutos y cuarenta y cuatro segundos tuvieron la culpa. Y eso que esta carrera tiene un par de repechitos y unos cuantos miles de metros en los que hay que atravesar un camino con unos pedruscos que pa qué.

Eso sucedió en la mañana más maravillosa que jamás hubiese podido yo desear, en cuanto a lo meteorológico se refiere. Fresquita, soleada, carente de viento. Tuve el acierto de ponerme cerca de la alfombra de salida, porque sino los casi 1200 que allí nos dimos cita me hubieran estorbado en los primeros metros. Mejor que te adelanten si quieren.

El tío Pedro Tolosa me sacó esta retrataúra.

Salí rápido, sí, y aunque los primeros repechos hicieron bajar un poco el ritmo, luego en el llano aceleré cuanto pude, manteniendo unos 4:30 para los cuales iba abriendo la boca como un besugo para que me entrase bien el aire. Hasta casi el km 4 no me adelantaron las flechas humanas de David y Jorge. Con eso os digo todo (claro, que se despistaron en la salida).

La segunda vuelta simplemente traté de no bajar el ritmo, incluso me permití acelerar en el último kilómetro. Únicamente lo hice para evitar que Luis, que venía 50 m detrás de mí, no me alcanzase, cosa que no conseguí puesto que, el muy mariquita pensó más o menos lo mismo que yo pero al contrario, y me quitó las pegatinas a unos 100 m del arco de meta. Claro, que el que tuvo retuvo, y le salió el último mil en 3:40.

Señores, nos vemos en Villarrobledo.

Gracias por estar ahí.
De nada por estar aquí.

Salu2.

Littlemills (or Tinymills)

He estado liado últimamente, y no he podido escribir algo sobre Molinicos cuando a mí me hubiera gustado. Sigo atareadillo, así que escribiré algo, aunque sea poco.

Molinicos fue mi primera carrera del Circuito allá por 2006, y es una de las pocas a las que he asistido cada año sin falta. Poco a poco he ido mejorando mis tiempos, e incluso hace un par de años empecé a conseguir acabar la carrera sin pararme a andar en ninguna de sus duras rampas. No miré cuánto tardé el año anterior, ni siquiera en qué kilómetro estaba el final de las cuestas, momento en el cual sólo queda bajar. Lo que sí que me fui dando cuenta es que debí salir fuerte, porque en seguida adelanté a conocidos a los que, si adelanto, es cerca del final. Incluso adelanté a gente a quien creo que nunca había ganado.

Hizo calor.

Hice lo que pude, que fue bastante ya que estoy en buen momento, pero sin obsesionarme. Fui poco a poco subiendo ese gran cerro, y cuando llegué arriba bajé tan rápido como fui capaz, aunque reconozco que cada vez me dan más miedo este tipo de bajadas. Al final fueron casi 1:11, unos dos minutos y medio menos que mi mejor marca, lograda el año pasado. Así que muy contento.

¿Y vosotros qué tal?

Y el domingo por la mañana también acudí al entrenamiento solidario organizado por el Club Don Quijote en beneficio del Cotolengo. Nos lo pasamos muy bien con los críos.

Foto de familia, nunca mejor dicho.

Gracias por estar ahí.
De nada por estar aquí.

Salu2.